Tanto el bambú como la seda se consideran ropa de cama de lujo y son una muy buena inversión para cualquiera que desee dormir mejor. De hecho, tener sábanas de calidad es tan importante como tener un buen colchón. Tanto la seda como el bambú son muy suaves y lisos y ofrecen grandes beneficios, como ser hipoalergénicos, antibacteriales, absorben la humedad y ayudan a prevenir las arrugas o el encrespamiento del cabello. Pero existen diferencias importantes entre los dos tejidos. Entonces, ¿cuál es mejor para ti? Si aún no sabes en qué tejido invertir, estamos aquí para ayudarte. 

1. Comodidad & Transpirabilidad

Las sábanas de bambú tienen acabado satinado con una suavidad increíble, muy agradables sobre la piel y, a menudo, se las compara con la cachemira. A diferencia de la seda, se vuelven más suaves con cada lavado sin ser resbaladizas. Mientras, las sábanas de seda pueden volverse demasiado resbaladizas.
Otra importante diferencia es que unas buenas sábanas de seda de 25 momme tienen un número elevado de hilos de más de 600 lo que puede puede impedir un buen flujo de aire. Las sábanas de bambú de alta calidad, por otro lado, tienen un número de hilos entre 250 – 350 lo que las hace mucho más transpirables. Además el tejido de bambú tiene micro-orificios en la superficie, lo que permite que “respire” mejor y regule la temperatura corporal

2. Durabilidad & Mantenimiento

Aunque la seda y el bambú son tejidos delicados y suaves, las sábanas de bambú son extremadamente duraderas en comparación con la seda porque las fibras de bambú tienen una estructura más fuerte y resistente. De hecho, el bambú se emplea frecuentemente en muchos países como material en las obras de edificios altos.
Comparado con la seda, las sábanas de bambú también se pueden lavar a máquina, con un ciclo frío y suave.
Por otro lado, las sabanas de bambú son más resistentes a las arrugas y las manchas que la seda. Por ejemplo esta última es bastante susceptible a las manchas de agua y estas son difícil de eliminar. 

3.  Sostenibilidad

Creemos que el respeto por el medio ambiente y la sostenibilidad de cada tejido es un elemento importante a considerar. En comparación con la seda, la ropa de cama de bambú es definitivamente más ética, respetuosa con el medio ambiente y sostenible.
El bambú es la planta con más rápido crecimiento del mundo y también se regenera después de ser cosechado, sin necesitar irrigación. Además, el bambú no contiene químicos, ya que no requiere fertilizantes ni pesticidas. Esto lo convierte en una opción segura en materia de salud. Las láminas de bambú también son biodegradables, lo cual es un gran activo para reducir la huella del carbono para las generaciones futuras.
La producción de seda, por otro lado, requiere grandes cantidades de agua y energía, así como el uso de gusanos de seda vivos, que mueren al final del proceso. Esto hace que las telas de seda no sean veganas y sean una opción menos ética en términos de bienestar animal o cuidado ambiental.

4. Costo

El bambú es una alternativa más asequible que la seda. De hecho, las sábanas de seda de alta calidad pueden costar más de 400€, mientras que las sábanas de 100% bambú suelen costar alrededor de la mitad de esa cantidad. Tomando en cuenta también que las sábanas de seda son más difícil de mantener y de menos durabilidad, comprar unas sábanas de bambú es una mejor inversión a largo plazo.


Por lo tanto, si estás pensando en comprar ropa de cama de alta calidad y no lo tienes claro cuál es la mejor, las sábanas de bambú parecen ofrecer una mejor relación calidad-precio, con más beneficios para ti y también para el planeta.